Hay algo muy atractivo acerca de las almas libres, te producen una sensación muy especial cuando te encuentras rodeado por alguno ellos y tienden a tener un efecto profundo en tu actitud y en tu vida. Es algo increíble.
Las personas de alma libre deberían ser reconocidas, celebradas y amadas. Pueden ser de muchos tipos, conozco músicos que lo son, a profesores, bibliotecarias, madres, deportistas, amantes de la tecnología y una gran variedad más. Pero estas almas libres tienen algo en común:
- Una persona de alma libre conoce el verdadero significado de ser libre.
Son personas soñadoras, apasionadas y amantes de la vida. Además tienden a tener un pensamiento libre, piensan por ellos mismos, toman sus propias decisiones y descubren sus propias creencias. No se sienten presionados por las expectativas sociales acerca de cómo deberían ser. Además saben que la libertad consiste en elegir rodearse de personas amables, generosas, comprensivas y empáticas. Para un pensador libre no existe algo que esté absolutamente bien o absolutamente mal, han aprendido que la vida está llena de matices y que las cosas “buenas y malas” en general forman parte de una opinión. Las almas libres son personas acogedoras, abiertas y comprensivas, y a los demás les gusta rodearse de su presencia.
- Un persona de alma libre le da la bienvenida a la adversidad.
Las almas libres persiguen sus pasiones. Ya sea pasar un año viajando, estudiando algo de su interés, probando un nuevo interés o simplemente descubriendo el placer que les da su vida en el día a día, eligen vivir sus vidas de forma que les haga feliz.
Estas personas no se dejan vencer por sus obstáculos. No importa si es el dinero, el momento o la circunstancia; un alma libre siempre encuentra la manera de lograr lo que quiere hacer.
- Las almas libres dejan ir todo lo que les impide avanzar en la vida.
Son personas muy conscientes y despiertas, por lo que notan rápidamente cuando algo no les está aportando en la vida y, poco a poco, las van dejando ir sabiamente. Un trabajo que no les está llevando a ningún lado, una relación nociva, un estado mental negativo, etc; son el tipo de cosas que deciden dejar salir de sus vidas.
Se re-descubren constantemente y se ven reflejados en las cosas que los hacen tan “ellos”. Las almas libres se preocupen de mejorar sus defectos e inseguridades, pero también son del pensamiento de que nadie es perfecto.
- Las personas de alma libre no se pre-ocupan, se ocupan.
Las almas libres se sienten orgullosas de sus logros, pero rara vez les verás presumir. Les gusta que les vaya bien en la vida, pero impresionar a otros no está dentro de sus prioridades. Las cosas materiales son bonitas, pero las personas de alma libre tienden a preferir las experiencias sobre las cosas. Y cuando adoran una cosa, en general, es porque tiene un valor sentimental para ellos. Para un alma libre el trabajo es algo importante, pero no es lo más importante en sus vidas. Se sienten identificados con el dicho “se trabaja para vivir, no se vive para trabajar.”
- Un alma libre es espontánea.
Son personas que ven en todas las situaciones una razón para sentir felicidad. Ya sea que suena su canción favorita en la radio o el nacimiento de su primer hijo, desde lo más cotidiano a lo más extraordinario, ellos viven cada momento valorando el regalo de estar vivos.
Son personas curiosas a las que les encanta descubrir el mundo. Conversar con una persona nueva, conocer un lugar nuevo, ver una película o leer un libro que no necesariamente es de su estilo, son sólo ejemplos de cosas que les gusta hacer. Las almas libres creen en posibilidades ilimitadas y se identifican con el dicho “si le sonríes a la vida, la vida te sonreirá de vuelta.”
- Una persona de alma libre se rebelará por un propósito elevado.
No es que las almas libres se rebelen simplemente porque existe un cierto “sistema”, clase o cualquier tipo autoridad. Se rebelan por causas e ideales profundos, cuando realmente sienten en lo más íntimo de su ser la convicción por algo. Son consecuentes y no les gusta ver que hay personas tipo “Cura Gatica: que predica y no practica”. Las personas de alma libre se unen a causas y las llevan a su estilo de vida. No les gusta la rebeldía por el simple acto de ser rebelde, de hecho piensan que muchas rebeldías hacen más daño que bien. Por eso eligen muy bien sus causas y las incorporan en su estilo de vida.
- Una persona de alma libre saca lo mejor de cualquier situación.
En vez de ser negativa y pesimista, un alma libre siempre encuentra la manera de ver el vaso medio lleno, y logran convertir un mal día en uno bueno, o al menos en uno de aprendizaje. Es por esto que las almas libres son las que lo pasan mejor en la vida. Se han dado cuenta de que el mejor momento para hacer las cosas es ahora, aunque no lo parezca. Ellas se identifican con el dicho “si la vida te da limones, haz limonada!”. Esta actitud resiliente se refleja en cómo llevan sus vidas y los demás les aman por ello.
Fuente: El vaso medio lleno